Premio Pritzker 2022: Francis Kéré, una arquitectura didáctica

El arquitecto africano fue distinguido por su desarrollo profesional y su compromiso social.

por Arq. Alberto Sbarra, Profesor Consulto FAU

El Premio Pritzker comenzó su actividad en 1979, cuando premió a Philip Johnson por entonces un arquitecto de prestigio formado con Mies van der Rohe y relacionado al MOMA (Museo de Arte Moderno de NY)¹.

Denominado “el Nobel de arquitectura”, el Pritzker fue ganando prestigio a través de los años, no sin generar debates y polémicas en su elección anual.

El segundo en ser premiado fue Luis Barragán (1980) y el mundo del arte y la arquitectura descubrió “otra Arquitectura”…belleza, silencio, serenidad, alegría, fueron destacados como atributos de esa nueva Arquitectura “otra”².

Es necesario destacar que, a pesar de ese camino sinuoso y a veces polémico ningún arquitecto/arquitecta premiado/a -de diferentes países, culturas y arquitecturas tan disimiles- rechazó este reconocimiento. Y así fue consolidando su prestigio.

En 2022, el anhelado premio recayó en Francis Kéré, arquitecto africano nacido en 1965. La noticia fue recibida con entusiasmo y también esperanza, no solo por la coherencia de su obra sino también por su postura acerca del rol del arquitecto, donde su fuerte compromiso social se percibe como  inseparable de su producción arquitectónica.

“…fue el primer niño que aprendió a leer en su pueblo de Burkina Faso. Viajó a Berlín con una beca y se convirtió en el arquitecto más famoso de África. Su primer proyecto consistió en levantar una escuela en su poblado. Procedente del mundo del barro, defiende la simplicidad y reivindica la dimensión social de su profesión^3″

Con esa primera obra construida en 2001, antes de terminar sus estudios, ganó el premio Aga Khan, prestigioso premio del mundo musulmán. Así empezó a ser conocido, primero en el campo disciplinar pero más tarde también en el cultural.

Desde entonces no ha dejado de trabajar para su comunidad y para otros lugares en el mundo donde las condiciones de vida expresan contextos de fuerte vulnerabilidad.

Hoy, Kéré es requerido en muchos lugares donde ya no es necesario recolectar el dinero para levantar un edificio e invitado para dar cursos en las universidades más prestigiosas.

Sin embargo (y aquí radica la fortaleza del premio) no ha dejado de trabajar “con lo que hay”, ayudado con la gente del lugar, consiguiendo fondos desde su Fundación, haciendo de promotor, arquitecto y activista social.

Su arquitectura es sencilla y con pocos elementos consigue dar respuesta a las demandas que le plantean: una plataforma arriba de la cual se construyen los espacios programáticos que a modo de “zócalo” generan una arquitectura de fuerte solidez. Por arriba un techo liviano de chapa y estructura metálica separado “vuela” para proteger de las grandes lluvias a los espacios construidos con arcilla y barro⁴. A partir de esta simple formula fue desarrollando y profundizando su arquitectura. Este es el camino elegido por Keré. Ir paso a paso perfeccionando la articulación del diseño popular con la arquitectura, los modos tradicionales de construir con los avances técnicos actuales. Y, en ese camino, no solo se va construyendo como arquitecto sino que va dejando un camino de enseñanza y compromiso, en la gente , con sus colaboradores.

Esas primeras ideas que dieron origen a su primer proyecto construido (la escuela primaria en Gando, su poblado) son el germen de su desarrollo posterior. Por eso decimos que su arquitectura y el modo de hacerla son altamente didácticas y pueden tener un impacto importante en el aprendizaje y enseñanza del proyecto arquitectónico sobre todo en los primeros años de la carrera.

Cuando discutíamos en la FAU el “perfil de arquitecto que el país necesita”, un gran maestro afirmaba que “no se trata de un único tipo de arquitecto, necesitamos toda clase de buenos arquitectos”. Estudiar la obra de Keré, no es para hacer lo que él hace, sino para preguntarnos qué queremos hacer con nuestra disciplina y que rol podemos asumir en los tiempos que corren.