Fue una propuesta de 4 encuentros teórico-prácticos abierta a toda la comunidad.
El curso “Acercándonos a la resignificación del mosaico”, que se desarrolló a lo largo de 4 encuentros, partió de identificar que, muchas veces, las personas no ven o no encuentran la posibilidad que tiene ante sus ojos, de utilizar materiales conocidos que hay dentro de sus hogares para mejorar su habitabilidad; sin caer en el hecho decorativo.
Las docentes fueron arquitectas Mariela Daniela Castagnasso y Mariel Ravara. “Esta técnica permite innovar, con materiales de uso común (retazos de azulejos, cerámicos, espejos, gemas de vidrio, vajillas, etc.) los espacios que conforman el hábitat cuyos objetos de uso pueden ser parte de hobbies o de un futuro microemprendimiento”, expresaron.
“El mosaico es una técnica ancestral, con características muy interesantes, como su duración en el tiempo. La idea es que la población recupere esos saberes previos, y haga valer tanto objetos en desuso en sus casas, como recortes sobrantes de revestimientos de distintas obras, para poder optimizar el hábitat donde viven”, señala Castagnasso.
En ese sentido, destaca que la propuesta del curso -desarrollado en FAUtec y FAU47- fue “acercar la técnica del mosaico y todas sus posibilidades a la población. Estuvo destinado a la comunidad, principalmente difundida en los desde los diferentes municipios”.
Este curso fue parte de una propuesta de la Secretaría de Extensión FAU para brindar espacios de capacitación no arancelados, dirigidos a toda la comunidad, que abarcan temáticas territoriales, con el objetivo de generar y/o fortalecer los vínculos con el sector productivo regional y/o local.
